lunes, 30 de diciembre de 2013

Un cachito

Remedios de Escalada Oeste

Corte Dia 30 de Diciembre

de 21,30 a 22,15 horas

Nada de Nada. Ni en las casas ni en las calles

Tampoco luz de La Luna

En plena ola de calor

SOCIEDAD
OLA DE CALOR

Pese al éxodo, no ceden los cortes de luz y los piquetes

Unas 120 mil personas dejaron la Ciudad rumbo a la Costa. Pero en varios barrios de Capital y GBA siguieron sin luz, con una térmica que llegó a 40 grados. Hoy, asueto en Ciudad, Nación y Provincia.
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Sigue la bronca. Vecinos sin luz protestaron anoche en la esquina de Nazca y Alvarez Jonte, en La Paternal. También hubo cortes en Caballito, Villa del Parque y Mataderos. / DIEGO. WALDMANN

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30/12/13-Clarin

El malhumor, el fastidio y los inconvenientes por la falta de energía eléctrica no ceden. El agobiante calor sigue y también los cortes de luz. La seguidilla de asuetos en las administraciones nacional y provincial –que se repite hoy con el agregado de la Ciudad–, prepararon el terreno para que el éxodo por las vacaciones de verano se pusiera en marcha ya desde el viernes y así disminuyera en la Ciudad y el GBA la demanda energética. Sin embargo, eso no alcanzó, el termómetro no acompañó –a las 15 de ayer la sensación térmica alcanzó los 40°– y continuaron las calles cortadas por vecinos indignados y hartos de no tener electricidad.

Entre el sábado y ayer a la tarde más de 26 mil vehículos y micros (unas 120 mil personas) salieron de Buenos Aires hacia la Costa. Este éxodo no cambió de modo notable la situación. Resulta muy difícil tener información completa sobre los alcances de las interrupciones del servicio eléctrico, aunque Clarín pudo verificar que ayer continuaban sin luz diferentes zonas de Belgrano, Mataderos, Villa Crespo, Villa del Parque, Caballito, Floresta, San Martín, Avellaneda, Lanús, Banfield y Adrogué.

La ministra de Seguridad de la Nación, María Cecilia Rodríguez, junto a su par de la ciudad, Guillermo Montenegro, señaló ayer que todavía había 11.000 usuarios afectados por los cortes de energía en el área metropolitana. Es decir, unas 44 mil personas.

Con la falta de electricidad también continuaron las protestas en las calles. Algunas se registraron en Caballito, Villa del Parque, Mataderos y Constitución, donde los vecinos armaron un fuego de grandes dimensiones en Entre Ríos y Garay. En Avellaneda se registró un piquete de vecinos en la esquina de De La Serna y Magán.

En Lanús, en tanto, vecinos cortaron ayer el cruce de las calles Santa Fe y Viamonte para protestar por la falta de energía eléctrica que afecta a la zona desde hace más de tres días. Encendieron neumáticos, ramas y hasta colchones para reclamar la “urgente reconexión del servicio”.

En esa protesta se produjo un hecho insólito. Fue cuando un grupo de manifestantes identificó cerca del lugar a un empleado de Edesur, al que decidieron mantener cautivo hasta que les resolviera la falta de suministro eléctrico. La gente que “secuestró” al empleado le dijo que no lo dejarían ir hasta que volviera la energía eléctrica. El operario se comunicó entonces con la empresa para dar aviso de su situación. Unos minutos después, una cuadrilla se acercó al lugar y restableció en 20 minutos el suministro de al menos un sector de la zona afectada. Recién entonces los “secuestradores” dejaron en libertad al empleado.

El “vaciamiento” de la Capital era una de las apuestas del Ministerio de Planificación para pasar la crisis energética, pero esa variable no dio los resultados esperados. Ahora la próxima apuesta es esperar el fin de la ola de calor, que se daría recién el jueves, para cuando se espera una máxima de unos 28°.

Para mañana a la noche se esperan todavía muy altas temperaturas ante la incertidumbre de muchos porteños y bonaerenses de si recibirán el Año Nuevo con o sin luz (muchos ya pasaron una Nochebuena a oscuras).

Desde Edesur informaron que el área de su concesión ayer logró mejorar la situación de algunas zonas. Informaron que proveyeron de grupos electrógenos y que, junto a AySA, procedieron al llenado de tanques de agua en edificios sin energía. La empresa distribuidora dijo también que esperan que en 72 horas, cuando el calor extremo ceda y la emergencia cese, puedan empezar a trabajar en soluciones más duraderas en las zonas más afectadas por los cortes de luz.

Desde Edenor, en tanto, afirmaron que el 99 % de sus clientes ya tienen un suministro normal de corriente. “Quedan pocos cortes, puntuales y aislados” dijeron a Clarín. Y agregaron que a los afectados por interrupciones del servicio les están brindando soluciones dentro de las 24 horas de surgido el inconveniente.

Comentarios de lectores en: http://www.clarin.com/sociedad/Pese-exodo-ceden-cortes-piquetes_0_1057094287.html

LA PROVINCIA EN LLAMAS: TUCUMAN

 

En plena ola de calor, en el sur recibirán el Año Nuevo sin agua y sin luz

Cientos de vecinos de varias localidades cercanas a Concepción sufren por las altas temperaturas, por la falta de líquido y por los cortes de energía.

Hace 4 horas – 30 Dic 2013 -http://www.lagaceta.com.ar/nota/574013/sociedad/plena-ola-calor-sur-recibiran-ano-nuevo-sin-agua-sin-luz.html

 

ANGUSTIA. Antonio y María, de Alto Verde, consideran que están abandonados por las autoridades. 

“Señor, por si no lo sabía, este es el infierno. Y nosotros somos los condenados por haber nacido aquí”. Con toda la angustia posible, don Antonio Maidana define al paraje La Resbalada, en Alto Verde, donde vive. Y agrega: “el calor es como un soplete que nos quema la cabeza en medio de la penuria de pasar días sin agua y horas sin luz. Así es muy difícil vivir”.
Maidana es uno de los casi 3.000 vecinos que habitan las orillas de la ruta provincial 330, que se extiende desde Alto Verde hasta Alpachiri. Ellos pertenecen a un rosario de parajes (entre ellos, Muyo, Cortadera y La Calera) que en medio de la ola de calor tienen dos problemas en común: la falta de agua potable y de electricidad. Vienen clamando por soluciones, Pero, según aseguran, hasta ahora nadie los escuchó.
Mientras que las temperaturas máximas pronosticadas para hoy y para mañana rondarán los 40°, ellos sobreviven con el agua de ríos, arroyos y acequias cercanas, según cuentan. A lo que no le encuentran salida es a los permanentes cortes de luz que se vienen produciendo desde que comenzó la ola de calor. “Da pena perder los alimentos que nos cuesta tanto conseguir”, lamenta Maidana.
“El drama de la falta de agua viene desde hace siete meses, cuando se rompió el motor del pozo que está en la escuela 117. A partir de entonces a veces sólo sale un hilo de las canillas. Hay días que pasan sin que veamos una gota. En esos momentos no nos queda otra que salir a buscar en acequias o en cualquier charco. En Navidad no teníamos ni para cocinar”, apunta María, esposa de Antonio.
Ella reniega porque los bebés de la zona, entre ellos el de su hija, sufren las crueldades del calor, porque no se los puede bañar. “Los mayores nos arreglamos yendo al río, pero a los chiquitos no se los puede sacar con temperaturas tan altas y el peligro de las picaduras de los bichos”, explica.
La SAT, en tanto, informa que los cortes de energía dejan inactivos los pozos que funcionan con electricidad, lo cual agrava aún más la situación (ver Los problemas de electricidad...).
Hacia el oeste, en el km 8 de la 330, se encuentra Cortadera. Se trata de una comunidad de cerca de 30 familias que nunca tuvo agua potable. Hasta hace poco se aprovisionaban de un pozo instalado en la finca de un legislador de la zona. Pero dejó de funcionar cuando se rompió el motor que extraía el líquido. “Desde que tengo memoria, los políticos prometen que van a hacer llegar el agua hasta acá. Pero después de que le damos el voto desaparecen. Ahora sobrevivo con lo que saco del pozo que yo mismo cavé hace unos años”, comenta Roberto Jiménez. “Al pozo lo hice porque había perdido la esperanza de tener agua potable algún día”, añade.
Manuel Goitea reconoce el gesto solidario de Jiménez, quien permite que todos los vecinos busquen el líquido en su pozo. “Por vivir sin tener agua ni para bañarse y con cortes de luz que duran varias horas nos da ganas de irnos corriendo. Pero en esta tierra nacimos, la sufrimos y seguramente aquí nos van a enterrar” añade Manuel.
Silvana Lezcano, de Muyo, asegura que la falta de líquido se agrava porque algunos agricultores consumen el poco que hay. Dice que el pozo del lugar larga agua sólo dos veces a la semana. Y no llega a todos. “Si hay que lavar la ropa o bañarse tenemos que ir a la acequia o al río. No hay otra opción” apunta. Hace algunos días cortaron la ruta en protesta por la falta de agua. “Hicimos lío pero no conseguimos nada hasta el momento”, comenta Silvana, decepcionada.
En La Calera, la falta de agua también desespera a los vecinos. Pero allí hay un pozo y una reserva elevada que fue construida hace poco mediante el programa “Más Cerca”. No se la puede aprovechar porque todavía no le instalaron el motor eléctrico que lo hará funcionar. Se trata de un extractor de agua que, según el comisionado comunal Juan Manuel Moreno, será colocado cuando se construya la casilla que lo albergará.
Un drama más y van...
Los pobladores marcan una contrariedad que también corresponde a la situación de desamparo que viven. “Ahora sufrimos la falta de agua, a pesar de tener dos ríos cercanos (el Chico y el Chirimayo). Pero cuando lleguen las tormentas seguramente nos inundamos. Es que las acequias están enlamadas, el agua desborda y se va a las calles. Esto es algo que a nadie parece importarle”, sostiene Goitea.
El corte
En el pie del cerro, algunos días tienen agua sólo una hora

“Todos los días dan el agua a eso de las siete hasta las 10. Pero ayer (por el domingo) a las 8 ya habían cortado. Me quedé sin llenar el tanque”, cuenta Irene (no quiere que se publique su apellido), una vecina de El Corte, al pie del cerro San Javier. Como tantos otros habitante de la zona, Irene ha convertido su pileta -en su caso una pelopincho- en una improvisada cisterna para almacenar la poca agua que les llega por día. Carlos Pereyra, quien tiene una verdulería en El Corte, se pasa buena parte del día haciéndole la guardia al agua. “Tengo un caño semiabierto y apenas veo que mandan agua me pongo a llenar dos tachos de 200 litros, además del tanque. Siempre hemos tenido problemas con el agua acá, pero con el calor y la sequía la cosa se ha puesto mucho más pesada. A veces nos cortan el suministro durante dos días y hay que estar preparados, al menos para poder bañarnos”, explica.
La mago
Zulema saca fuerzas de donde no tiene para cargar los baldes

Con las piernas hinchadas y los pies descalzos, Zulema Montero, de 55 años, acarrea agua para lavar los platos, limpiar su casa, cocinar y bañarse. En el barrio donde vive, conocido como La Mago (pegado al parque Guillermina), la presión de agua es tan débil que el caudal llega sólo hasta el portón que da a la calle. Desde ahí, ella carga pesados baldes para atender a los seis nietos que está criando. “Hace poco me han hecho la instalación, pusimos caños nuevos, y tengo mucho miedo de que se resequen con semejante calor, porque no tienen agua. Sería un doble gasto”, cuenta preocupada la abuela. Cuando le queda tiempo, Zulema se instala en la avenida Adolfo de la Vega a vender flores. Las compra y las tiene que vender lo más rápido posible, porque sabe que al llegar a su casa es probable que no tenga cómo regarlas. “Hace más de tres meses que estamos así y ahora con el calor empeoró todo”, afirma.

HAY COMENTARIOS DE VECINOS DESESPERADOS EN

 

http://www.clarin.com/sociedad/Llegaron-afectados-cortes-crisis-sigue_0_1056494423.html

14 dìas sin luz

Llegaron a 800 mil los afectados por los cortes y la crisis sigue

POR ANTONIO ROSSI - Clarin
Anoche continuaban los piquetes de vecinos enojados en Capital y GBA. Se mantiene la alerta roja y el calor no cede. Ni el Gobierno ni las empresas pueden explicar cuándo se normalizará el servicio.

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Bloqueado. Anoche se mantenía cortado el cruce de avenida General Paz con la autopista Riccheri. /MARIO QUINTEROS

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29/12/13 - Clarin

En medio de los inconvenientes, las penurias y las situaciones límites que vienen padeciendo los usuarios de la región metropolitana por los cortes de luz, hay dos cuestiones clave que el Gobierno y las distribuidoras eléctricas no quieren responder ni poner sobre el tapete.

La primera es qué cantidad de usuarios y habitantes se han visto afectados por la falta de suministro en la Capital Federal y el Gran Buenos. Y la segunda es cuándo realmente se podrá normalizar la prestación del servicio por el marcado deterioro que registran los cables y las redes de distribución.

Con respecto a la primera cuestión, se advierte claramente que tanto desde el lado oficial, como del sector privado existe un llamativo silencio acerca de los alcances y la duración de los cortes que se vienen registrando desde principios de diciembre.

En los primeros días del mes, los problemas de abastecimiento se debieron al temporal que había afectado parte de ciudad de Buenos Aires y varios partidos de zona sur del conurbano.

En tanto, a partir del martes 17 los cortes comenzaron a producirse por el impacto de la ola de calor que aún sigue jaqueando al área metropolitana.

De acuerdo con los datos que manejan los especialistas del sector, el “pico” en la cantidad de afectados por los cortes se habría registrado el viernes 20.

Ese día se quedaron sin servicio eléctrico unos 200.000 clientes residenciales directos de Edenor y Edesur, lo cual implica que en total fueron unos 800.000 habitantes los que se vieron afectados por la falta de luz.

Para los técnicos del sector, un cliente con medidor equivale, en promedio, a un hogar integrado por cuatro personas.

Tras solicitar una expresa reserva de sus nombres, los técnicos del ENRE y las distribuidoras consultados por Clarín admitieron que desde el sábado 21 hasta el viernes 27, la cantidad de clientes residenciales sin luz osciló entre los 50.000 y 70.000. De esta manera, se vieron perjudicadas entre 200.00 y 280.000 personas por día.

Pese a lo que dicen las distribuidoras, ayer los cortes siguieron dominando el escenario. Con un creciente nivel de bronca y malhumor, la gente volvió a salir a cortar las calles y avenidas y a quemar gomas para protestar. En la Capital, los barrios más afectados fueron Caballito, Almagro, La Boca, San Telmo y Flores, entre otros. En tanto, en el Conurbano siguieron sin energía los vecinos de Lanús, Avellaneda y Tigre, entre otros puntos. Las autopistas Riccheri y Dellepiane también estaban cortadas anoche en forma parcial o total.

La segunda cuestión significativa sobre los cortes de luz que nadie puede responder gira en torno a cuándo terminará esta situación crítica. Según estimó ayer el ministro de Planificación, Julio De Vido, hay que esperar hasta el próximo miércoles para que disminuya el calor y se normalice el abastecimiento.

Pero, para los expertos del sector, la regularización plena en el área metropolitana recién podría darse a mediados de enero, siempre y cuando no sigan los calores extremos y se repongan rápidamente cables, llaves y sistemas de protección dañados en los últimos días.

Además, hay una cuestión saliente que también promete incidir en los tiempos de rehabilitación del servicio eléctrico. Se trata de la decisión oficial que se adoptará ante los incumplimientos de las distribuidoras. Un sector del Gobierno es partidario del máximo castigo que es la rescisión contractual. Otro sector considera que deben aplicarse fuertes multas y mantener a las actuales concesionarias privadas porque el Estado no está en condiciones de prestar el servicio.

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domingo, 29 de diciembre de 2013

La Ciudad, sitiada

Hubo más de 40 piquetes para protestar por la falta de luz

POR EZEQUIEL VIÉITEZ DIEGO GEDDES-Clarin
Varios grupos de vecinos cortaron las autopistas 25 de Mayo y Dellepiane, el Puente Alsina y las principales avenidas y calles porteñas. Los cortes de energía ya llevan 13 días. Y el calor no afloja.

Bloqueado. Ayer, en Puente Alsina se encontraron los conductores que salían de la Ciudad con vecinos de Lanús que protestaban por los cortes ./ ANDRADE

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28/12/13-Clarin

En el último viernes del año, la Ciudad se convirtió en un tetris gigante e imperfecto. Todo se cruzó con todo: vecinos que siguen protestando en las calles, algunos de ellos luego de 13 días sin luz ni agua, empleados que salían de sus trabajos y querían volver a sus casas y aquellos que se iban a la Costa para pasar las fiestas lejos de una Buenos Aires que se vuelve cada vez más imposible. La consecuencia, entonces, fue obvia: desde la tarde, la ciudad estuvo sitiada, taponada, con más de 40 cortes de calles en diferentes puntos.

Fue como un espejo. Calor arriba y calor abajo. Arriba: el sistema de alta presión del Atlántico sigue instalado sobre el continente y ese hecho, que genera altas temperaturas en el centro y norte del país, al mismo tiempo causa un “bloqueo atmosférico” que impide que entren masas de aire frío. Y abajo: miles de vecinos siguen sin luz y sin agua, la mayoría sin respuesta para sus reclamos y con palabras poco sensatas de los –pocos– funcionarios que intervienen en el conflicto.

En Puente Alsina se produjo uno de los cortes más importantes. Desde las tres de la tarde, un grupo de vecinos del barrio Eva Perón, en Lanús, quemó llantas y cortó el puente para reclamar que no tenían luz desde el 23 de diciembre. Se vieron escenas de paso fronterizo, de éxodo bíblico. La mayoría eligió cruzar a pie y el puente se convirtió en peatonal. Quedaron colectivos abandonados, sin pasajeros ni choferes, y por Amancio Alcorta, unos diez camiones seguían anoche a la espera de que se levantara el corte.

La situación, por momentos, fue un conflicto entre damnificados, y casi sin respuestas oficiales, lo que acrecentó todavía más la bronca. Los mismos policías que estaban del lado de provincia contaron a Clarínque estuvieron todo el día haciendo llamados a sus superiores para ver qué tenían que hacer, si tenían que desalojar el puente o no: “Nadie se hizo cargo”, dijeron, aunque finalmente el corte se liberó cerca de las 10 de la noche.

Paula Tierno venía desde su trabajo, en Lanús, en una combi: “Cuando vio que estaba cortado, el chofer empezó a dar vueltas, pero se encontraba con que había más cortes y llantas quemadas en cada esquina. Cuando llegamos a Avellaneda, el chofer nos dijo que nos bajáramos. Terminamos volviendo en tren, desde la estación de Avellaneda, y todos nos quedamos con la sensación de que era la única alternativa”, dijo Paula, que terminó pidiendo asilo a su hermana, en Once, porque en su casa tampoco había luz.

Del otro lado del corte, Graciela Mossesian había ido a ayudar a su mamá, de 90 años, que tiene luz en su edificio de Villa Devoto, pero por la baja tensión no puede usar el ascensor. Cuando Graciela quiso volver para su casa en Lomas de Zamora, se encontró con el corte en el Puente Alsina. Pero como su auto estaba entre los primeros, quedó varada, con dos de sus hijos, de 10 años, a bordo. “Entiendo la situación de esta gente, pero no pueden cortar la calle. Que vayan a protestar a la Casa Rosada”, dijo Graciela, que entre las vueltas que dio y el uso del aire acondicionado, se quedó sin nafta.

Fabián Marassi tiene una carnicería en Colombres y Constitución y fue para rescatar algo de la mercadería. “Estuve sin luz medio día. Estuve a pocas horas de perder 20 mil pesos de mercadería”, dijo. “Entiendo la protesta, es una situación de pobres contra pobres, pero nadie se hace cargo, nadie da una respuesta”.

Anoche, al cierre de esta edición, la policía esperaba la llegada de una cuadrilla de Edesur para custodiarla en el ingreso al barrio Eva Perón y tratar de resolver el problema de la falta de luz que padecen allí la mayoría de los vecinos.

En Capital, los cortes más importantes –de luz, de calles– fueron en Corrientes y Angel Gallardo, Coronel Díaz y Paraguay, Thames y Córdoba, y en Rivadavia y Senillosa. En la zona del Hospital de Niños, en Palermo, Mariana ya sabía que estaba sin luz, pero su portero le avisó que ni siquiera fuera para su casa: “Me dijo que se habían gastado las baterías de las luces de emergencia, y que en el edificio estaba todo oscuro. Ni con una antorcha se puede entrar”.

En muchos cortes de calle, los contenedores sirvieron para armar barricadas. En Carlos Calvo y Perú, vecinos sin luz decoraron los contenedores con mensajes para todos: “Macri y Cristina son cómplices de Edesur”. Y así pasaron otra noche sin luz.

“La sorpresiva huelga de los aires acondicionado”

28/12/13 – Cartas al Pais de Clarin

Lo que leerán a continuación puede ser interpretado como una simple manifestación de socorro, bronca y decepción por ser uno más de los miles de perjudicados por los constantes y prolongados cortes de energía eléctrica. Sí, tal vez por lo intolerable de por sí del calor, y de la sorpresiva huelga de los equipos de aire acondicionado de mi casa, que no están funcionando ni siquiera cuando sí “hay luz”. Al haber inestabilidad y oscilación en la energía que ingresa, se ve que los acondicionadores deben tener alguna suerte de protección que provoca que salgan de servicio. Las luces de casa se atenúan por momentos. Los ventiladores desaceleran y aceleran su marcha todo el tiempo como si estuviesen poseídos por no sé qué cosa.

EL IVR (Interactive Voice Response) de Edenor ya lo conozco de memoria. La opción 3 casi siempre te indica que la gestión del reclamo se hará en forma automática. Eso sí, previo a comunicar la asignación del número de registro la comunicación se corta. La familia entera vamos trasladándonos noche tras noche de una habitación a otra junto con colchones y almohadas, ventiladores, prolongadores, triples y linternas, y rogando que el acondicionador si no enfría, al menos ventile. Hace una semana, luego de 11 horas de “without energy” (sin energía) tuvimos la suerte de que los casi 10 kg de carne que pudimos conseguir con un 30% de descuento en la góndola kosher, logró el freezer que se mantengan congelados. No corrieron la misma suerte los lácteos y algunas verduras de la heladera que tuvimos que tirar a la basura. Al consultar en Edenor si me pagarían los alimentos perdidos, me respondieron que su asegurador cubre sólo averías en artefactos eléctricos.

Atentan contra la paz personal, familiar y también social. Los comerciantes tienen terror de que los saqueen; la gente en la calle está descontrolada, cansada, decepcionada y lamentablemente violenta. Los precios no dejan de crecer.

Sé que todo lo que narro es una pavada al lado de todo lo que les pasa a otras personas en otros puntos del país. Pero estoy seguro que más de uno se va a sentir identificado. Uno tiene derecho a disfrutar y poder resolver rápidamente cuestiones operativas básicas.

Aplaudo a todo el que pueda organizarse de algún modo para experimentar en otra latitud; en otro país con planes a futuro, respeto por el ciudadano y amor por el bienestar. ¡El que pueda raje! Aquí no hay vocación de solución.

Pablo Piccioli Bajraj pbajraj@gmail.com

Andar al rojo vivo, sin la luz ni el agua
En momentos en que un pueblo necesita la presencia de quienes nos gobiernan, estos brillan por su ausencia. La Tragedia de Once, las inundaciones de La Plata, la corrupción, la inseguridad. Y ahora los cortes de luz. Tanta gente gobernando y tanta gente padeciendo sus desidias. ¡Pobre gente sin agua, sin luz! ¿Y los derechos humanos de los que sufren el abandono de un Gobierno sordo? Pobre esta democracia sin república.

María del Carmen Pascual mariadelplata22@yahoo.com.ar

La funcionaria Claudia Rodríguez festejó los cortes de luz en Recoleta casi como un acto de justicia divina, cuyos habitantes son considerados “enemigos del modelo”. Nunca quedó más claro cuál es “el modelo”, por eso desde hace años muchos nos venimos preguntando de qué se trata. La realidad muestra que cada vez todos tenemos menos, salvo los funcionarios que tienen luz, grupos electrógenos, aire acondicionado y veranean en Miami y Punta del Este gracias a sus cuentas que crecen casi por arte de magia.

Gustavo Gil gustavogil68@hotmail.com

Queríamos cambiar con mi familia la rutina navideña y gracias a Edesur y al Gobierno lo logramos. Después de 12 horas sin luz comenzamos con los preparativos. A las 6 de la tarde nos comimos los tomates rellenos, antes de que se calentaran. A medida que oscurecía, y al calor de las velas, nos reunimos como si estuviésemos en un fogón, deshidratándonos. Jugamos a acertar si la carne estaba cocida o cruda alumbrando con una vela. A las 12, empapados de transpiración brindamos con sidra, aunque no sé quién dijo que era té de manzana. Para no tirar cohetes que son peligrosos, tiramos la leche, el yogur, el queso y dos tomates rellenos que habían cambiado de color. Luego nos fuimos a tratar de dormir, con la emoción de haber vivido una Navidad diferente.

Daniel Rico daniel@danielrico.com.ar

Los cortes de luz y agua me permiten una ironía antes de fin de año. El país es un horno, y nadie se hace cargo, menos la Presidenta. Cortes de luz y falta de agua que movilizan ciudadanos a cortar las calles y autopistas para que los escuchen. ¿No se dan cuenta de que estamos al borde un estallido social? El Estado nos está matando de a poco, primero con la corrupción, inflación, inseguridad, falta de trabajo, igualdad de oportunidades, sufrimos el despiadado saqueo estatal. Ahora, con alevosía sufrimos los cortes de luz y agua. Presidenta, los argentinos que la votaron, (yo no), ésos para los cuales usted dice gobernar que no son los cuarenta millones, se están muriendo por la desidia y la corrupción existente en su Gobierno.

Beatriz Lopapa bmlopapa@gmail.com

Tengo 54 años, y lo que nos pasa ya pasó. Estamos viviendo lo que decía Tato. Estoy sin luz desde el viernes 20, reclamé a Edesur y logré que cuatro veces me atienda una operadora, pero anularon un reclamo porque no encontraron la calle. El domingo 22 me contestaron que normalizaron la fase, pero no tengo luz. En el ENRE me atiende una máquina. Y por fin vinieron y yo tenía razón, era el fusible del palo de luz. No puedo olvidarme de Tato, le diría gracias por hacerme entender desde el humor, porque no hay que bajar los brazos, gracias por animarse a decir lo que los libretistas escribían. A su hijo, Alejandro, le diría gracias por opinar desde la realidad del humor. Parafraseando a algún humorista: “La industria de pilas y generadores electrógenos continúan con superávit”.

Stella Estrada playaroja@hotmail.com

viernes, 27 de diciembre de 2013

“De lo que no se puede hablar, es mejor callarse”.

Culpar a la gente por los cortes de luz: una verdadera caricatura k

Por Miguel Wiñazki - Clarin
Un dibujo en Página/12 traslada las culpas a la sociedad. Hubo duras críticas en la Web.

Punto de vista. Para Daniel Paz el “argentinomedio” ignora que merece el castigo de la falta de luz.
Punto de vista. Para Daniel Paz el “argentinomedio” ignora que merece el castigo de la falta de luz.

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27/12/13

El jardín de las delicias de las discusiones comunicacionales encuentra frecuentemente en el humor político una promoción y una expansión del debate público.

Tras las apreciaciones presidenciales que acusaron en un momento al maestro Hermenegildo Sábat de emitir un mensaje “cuasi mafioso” por dibujar a Cristina Fernández, las caricaturas se convirtieron también en blanco dilecto de los estigmas oficialistas contra los medios.

Ahora acaba de producirse un fenómeno exactamente inverso. Tras la caricatura “kirchnerista” –si se la puede calificar de alguna manera– de Daniel Paz en el diario oficialista Página/12, sobrevino un aluvión de críticas que no fueron dispuestas verticalmente desde la cima del poder. Paz criticó al argentino promedio, según su visión. Y convirtió a las víctimas en victimarios, de algún modo, de los cortes de luz. Acusó en su dibujo y en el texto alusivo al “Sr. Impoluto Argentino” y a “Su esposa la Sra. Inmaculada Indignación de Argentinomedio” por haber pagado una tarifa de electricidad como “la de Bruslavia del Norte”,y de “exigir un servicio de electricidad como el de Suiza”.

Se produjo un efecto aluvional de burlas y repudios en las redes sociales, desde la horizontalidad del espacio virtual. Fue una tormenta de rayos, y hachas estridentes. “Daniel Paz” logró convertirse en trending topic, tras el mérito de haber gatillado la furia de quienes padecen los cortes.

El patrón que unía a la mayoría de los tuits está muy bien sintetizado en lo que escribió el usuario @fedeaikawa, (Federico Aikawa): “Según la lógica del chiste de Daniel Paz en Página 12, si te morís en el tren no te podes quejar porque pagas 1.20 (si es que pagás)”.Se destacó también el hecho irrefutable de que Página/12 donde dibuja Paz, es paradojalmente un diario subsidiado por el Gobierno.

El mensaje es “Se lo merecen”.

Merecemos ahora el calvario de la falta de luz, el espanto de los ancianos condenados por vivir en los pisos altos de los departamentos, el vía crucis de los que cobran una jubilación misérrima y pagan la luz que no tienen... Criticó Paz en su caricatura a los enfermos, a los que están internados en los hospitales que en diversos sitios se quedaron sin luz en alguno o varios de sus pabellones. Paz le echó la culpa a la mayoría inocente de toda inocencia.

Logró igualar, lo que no es fácil, la memorable consideración del relator Víctor Hugo Morales en relación al mismo tema, cuando consideró que” algunos ricos usan el termostato del aire acondicionado como herramienta de desestabilización ”.

Ahora hay que agregar a la lista de enemigos de la patria a los termostatos destituyentes y también al “Argentinomedio”.

Es la persistente pedagogía de 6,7,8, que no se rinde.

Es el mismo mecanismo que se replica: defender el Gobierno y la mejor defensa es un buen ataque contra el que venga, contra cualquiera, contra todos los que no defiendan el Gobierno dogmáticamente.

En Twitter, la piedad no abunda y sí el tiempo de revancha tras el extenso modelo hegemónico de los ciberK. Aquellos que obedientes a la filosofía oficialista, frecuentemente a costa de la billetera paragubernamental que les ha pagado para ello, lanzaban permanentes difamaciones al por mayor contra los réprobos según la Nomenklatura gobernante.

Es interesante observar como los ciberK no mencionan ahora al teniende general Milani, para citar un sólo ejemplo de enmudecimiento repentino en las filas del tuiterismo alcahuete.

Como escribió el filósofo Ludwig Wittgenstein: “De lo que no se puede hablar, es mejor callarse”.

Cortes de luz, broncas y un Gobierno indiferente


Quiero transmitir el dolor y la indignación que me producen los cortes de luz que aún padecen tantas personas. ¿Cuándo el Gobierno nacional se va a hacer cargo de su inoperancia? ¿Cuándo van a reconocer que como Estado son parte del problema? Desde distintos sectores hubo advertencias, pero el que se aferra al discurso del “modelo” de “la década ganada” hizo oídos sordos, y éstas son las consecuencias.

Rosa Clara Porrati rosaclaraporrati@yahoo.com.ar Me he dado cuenta que con la falta de energía eléctrica nuestros gobernantes tampoco se iluminan, dado que a ninguno se le ocurrió dictaminar un decreto que prohíba, momentáneamente, el uso de luz en las marquesinas de los locales comerciales, fuera del horario de atención al público; como así también los edificios estatales. Mientras, los ciudadanos siguen sufriendo innumerables cortes de luz, afectando nuestros derechos y garantías.

Susana H. Fazzari sfm092@hotmail.com Ante la gran e increíble indiferencia del Gobierno nacional y la inoperancia e inutilidad de Edesur y Edenor, ¿cuál es el papel que le corresponde al Gobierno de la Ciudad en cuanto a la defensa de los ciudadanos ante la falta de energía eléctrica. Yo soy uno de los tantísimos ciudadanos de Buenos Aires que no tiene luz ni agua. Estamos indefensos. Hagan algo.

Alejandro Cicala alitocic@gmail.com

Lanùs sin LUZ

CORTES DE LUZ EN LANÚS - ESTO SUCEDE CADA VERANO.

GRUPO ABIERTO EN FACEBOOK SOBRE LOS CORTES DE LUZ EN LANÚS. ALGO QUE VIENE PASANDO HACE RATO....

Jueves 26 de Diciembre de 2013 | 21:34

CECILIA NUPIERI

CECILIA NUPIERI Usuario de TN y la Gente

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EL VERANO PASADO INICIE UN GRUPO ABIERTO EN FACEBOOK  SOBRE LOS CORTES DE LUZ EN LANÚS ESTE Y ALREDEDORES, CANSADA E INDIGNADA DE QUE EDESUR NO HAGA NADA DECIDÍ TOMAR TESTIMONIOS DE VECINOS Y COMERCIANTES DE LA ZONA FILMÁNDOLOS CON MI CELULAR, NO SOY PERIODISTA, SOY UNA PERSONA HARTA YA DE QUE SE ABUSEN DE LA GENTE, DE TODOS NOSOTROS, LA IDEA ERA DENUNCIAR EN ALGÚN MOMENTO, AHORA EL GRUPO DE REACTIVÓ CON LA ACTUAL SITUACIÓN, CON CORTES MÁS PROLONGADOS, Y NO SE PUEDE VIVIR ASÍ CON TANTO CALOR, SIN AGUA, SIN LUZ, XQ NO SUBE EL AGUA A LOS EDIFICIOS SIN LA LUZ, TENGO MUCHA INDIGNACIÓN. LOS INVITO POR FAVOR A UNIRSE AL GRUPO Y QUE ALGUIEN POR LO QUE MÁS QUIERA NOS LEA. QUISE PONER MI GRANITO DE ARENA, LA GENTE SE FUE SUMANDO. YO EN UN MOMENTO DEJÉ DE ESCRIBIR EN EL GRUPO CANSADA DE TANTA IMPUNIDAD, PERO BUENO, AÚN QUEDA ALGO DE MI ALMA JUSTICIERA, QUE PELEA POR NUESTROS DERECHOS.

ESTE ES EL GRUPO, LEAN A LA GENTE INDIGNADA, ESCUCHEN LAS NOTAS DEL AÑO PASADO, CADA VEZ ES PEOR....Y EL AÑO QUE VIENE QUE NOS ESPERA SI SEGUIMOS DEJANDO QUE HAGAN LO QUE QUIEREN LAS PRESTADORAS DE SERVICIOS EDESUR Y EDENOR, LOS POLITICOS QUE NO LOS PONEN EN SU LUGAR, QUIEN CORNOS NOS REPRESENTA???? AL MENOS YO DESDE MI HUMILDE Y PEQUEÑO LUGAR INTENTO DARLE VOZ A TODOS LOS QUE NO PODEMOS NI TENEMOS MICRÓFONO, NI CÁMARA, NI PODER EN EL GOBIERNO NI ABSOLUTAMENTE NADA, SOY UNA SIMPLE CIUDADANA QUE LUCHA POR LOS DERECHOS BÁSICOS DE TODO SER HUMANO PARA PODER VIVIR.

LES COPIO EL LINK POR FAVOR NO SEAN INDIFERENTES A ESTO. 

MUCHAS GRACIAS Y SALUDOS

CECILIA NUPIERI

https://www.facebook.com/groups/458260057573230/

Crece la bronca por el drama de vivir sin luz ni agua con 38°

Por Victoria De Masi - Clarin

Vecinos de Capital y GBA protestaron en calles, vías y autopistas por los cortes, que llevan 12 días. El calor es récord y pronostican que seguirá al menos hasta el lunes. La odisea de los damnificados.

Barracas. Un grupo de vecinos cortó anoche la avenida Martín García, entre Piedras y Bolivar, en protesta por los apagones. Hubo nuevos cortes en las redes de Edesur y Edenor. /JUANO TESONE
Barracas. Un grupo de vecinos cortó anoche la avenida Martín García, entre Piedras y Bolivar, en protesta por los apagones. Hubo nuevos cortes en las redes de Edesur y Edenor. /JUANO TESONE

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27/12/13

Un perro ladra desde la sombra del departamento de un primer piso en Flores. Afuera es de día y el calor hace de la tarde un animal espeso, que se arrastra. Adentro del edificio es igual: el aire es denso, huele a podrido. El sudor es inevitable. Las moscas también. Alguien ha dejado al perro ahí, con la puerta entreabierta para que un vecino le dé de comer. El dueño de la mascota abandonó, como tantos, su casa. La falta de energía eléctrica generó un pequeño éxodo en muchos barrios de la Ciudad y el Conurbano. Los vecinos van a parar a casas de amigos y parientes. Pero también están los que se resisten a abandonar su hogar porque no tiene dónde ir o porque les parece injusto abandonar su lugar.

Ayer fue el 12° día consecutivo de altas temperaturas –el termómetros tocó los 38 grados– y cortes de luz, un combo que sigue generando angustia y bronca. Algunas zonas de los barrios porteños de Recoleta, Caballito, Almagro, Villa Crespo, Villa del Parque, Devoto, Urquiza, Paternal y Mataderos sufrieron ayer cortes en la redes de Edenor y Edesur. Lo mismo sucedió en puntos del GBA, como Lanús, Avellaneda, Victoria, Vicente López, Olivos, Munro, Ramos Mejía, Hurlingham y Ciudad Jardín.

La gente reaccionó. A la mañana, un grupo de vecinos cortó la autopista Dellepiane. Otros hicieron un piquete en Corrientes y Serrano, y en Juan B. Justo y Trelles. En Domínico bloquearon las vías del Roca y en Flores, la del Sarmiento. Por la tarde, hubo nuevos cortes en Gerli y Lanús, donde la gente intentó prender fuego una oficina de Edesur. Esa empresa avisó que ayer puso en marcha un operativo junto con Aysa para facilitar la provisión de agua potable en los edificios que no tiene electricidad por los cortes. Consiste en el traslado de grupos electrógenos de Aysa junto con una cuadrilla de Edesur que se encarga de dar electricidad a las bombas que llevan el agua desde las cisternas a los tanques.

Para Daniel ya es tarde. Vecino del 6°B del complejo de Bacacay 2685, en Flores, juntó agua en la bañadera para descargar el inodoro, asearse, cocinar y lavar algún plato. Pero se le acabó el agua y la paciencia, y mandó a su hija y a su mujer a Misiones. “No podía tenerlas así. Yo puedo aguantar, pero ellas, no. Llevamos cuatro días sin luz”, dice, parado en el living del departamento de Oscar y Estela. Oscar es paciente oncológico y debe aplicarse una inyección cada 28 días. “No puedo dejar que pierda la cadena de frío. Pude preservarla un par de días, pero ya es imposible”, cuenta el hombre mientras Estela, indignada, enumera: “Tiré asado, leche, yogur, queso, manteca, crema”. En la conservadora de frío que llevarán a lo de su hija –adonde se mudarán quién sabe hasta cuándo– asoman las cabezas doradas de dos botellas de sidra. Es lo que quedó de Nochebuena, que para ellos fue una recreación de la última cena: a la luz de las velas. En la cuadra donde viven Daniel, Oscar y Estela, hay dos geriátricos sin luz, una mujer con un hijo discapacitado, y también Silvia y Juan, una pareja de jubilados que se empapó en toallones para tirarse a dormir en el balcón y soportar el calor. “Se nos acabó hasta el agua que teníamos de reserva. Nos vamos. Estamos hartos”, dice Silvia.

Cada tanto en ese pedacito del barrio de Flores se escucha el rugir de los generadores de energía. Son pequeños y están conectados precariamente. Un cable negro, un alargue desde la casa de sus vecinos alimenta la heladera y el ventilador de pie de Tito. Y nada más. Carla es la mamá de Liam y dejó su casa porque la leche para el nene se pudría. “Me instalé en lo de mi papá y también se cortó”, explica Carla. Su familia tiene una verdulería en Directorio al 3600. Las heladeras están apagadas. “No hay frío, no hay venta”, dice Carlos.

En Villa Santa Rita y Villa Crespo viven el mismo drama. Mauricio tiene 73 años y está operado de ambos pulmones. Le cuesta respirar y vive en el piso 11 de un edificio en Serrano al 400. “Esto es lo más cercano a una tortura”, se lamenta. Margarita vive en Juan B. Justo y Trelles. Hace un mes le amputaron la pierna y tiene que ir al hospital dos veces por semana. ¿Cómo la trasladan? La atan a una silla con sábanas y a la silla la amarran con sogas. Así la llevan hasta la planta baja desde el tercer piso. “Es un desastre. Prefiero estar en el hospital antes que en mi propia casa”, dice, angustiada.

Colaboró: Mariano Gavira

Si no sabès . . . no hablès

“El sistema opera con normalidad”, dijo De Vido en medio de los cortes

Tras dar ese diagnóstico, pidió a la gente que confíe en su gestión.

Protesta. Vecinos de Gerli hicieron una manifestación para reclamar la vuelta del suministro eléctrico./AGENCIA BUHO
Protesta. Vecinos de Gerli hicieron una manifestación para reclamar la vuelta del suministro eléctrico./AGENCIA BUHO

27/12/13 - Clarin

En medio de la ola de cortes de luz y de calor que tiene a miles de personas de Capital y GBA con muy mal humor, las puertas y ventanas de las oficinas del Ministerio de Planificación Federal lucían cerradas por el asueto administrativo que dio el Gobierno. No obstante, desde la oficina de prensa del ministro Julio De Vido se emitió un comunicado en el que se expresa: “Cabe destacar que el sistema (de interconexión eléctrica) opera con normalidad y cuenta con reservas adicionales”.

El insólito diagnóstico oficial se conoció por la tarde, mientras los cortes de calle en protesta por la falta de suministro se reproducían en varias esquinas porteñas. Vecinos que hace ya casi dos semanas que no obtienen respuesta para volver a tener luz y agua, algo frío que tomar o evitar el ejercicio obligado que implican las escaleras.

Minutos antes del comunicado, De Vido hizo declaraciones en el canal de noticias C5N. Allí recordó que el “call center (del ministerio) siempre se obtiene una respuesta y, si no son atendidos inicialmente, a los 15 minutos se los está llamando para detectar el problema y trabajar en su reparación”.

En la misma entrevista agregó: “Yo le pido a la gente que confíe en nosotros y nos llame”, afirmó. Y se comprometió a “resarcir económicamente los daños provocados por los cortes de energía una vez que concluya esta contingencia”.

Desde la oposición, la vicejefa del gobierno porteño, María Eugenia Vidal, advirtió que “la magnitud del problema requiere una respuesta más estructural tanto desde las empresas eléctricas como desde el gobierno nacional”.

38º y SIN LUZ ELECTRICA

Buenos Aires al rojo vivo: sin luz ni agua con más de 38°

Algunas zonas ya llevan dos semanas a oscuras. Hay manifestaciones en diferentes barrios porteños. Historias de personas que no abandonan su hogar.

Edición Impresa: viernes, 27 de diciembre de 2013 http://www.losandes.com.ar/notas/2013/12/27/buenos-aires-rojo-vivo-agua-758638.aspBuenos Aires al rojo vivo: sin luz ni agua con más de 38°

Vecinos de Rivadavia al 300 cortan la avenida para reclamar por la falta de suministro eléctrico.(DyN)

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Un perro ladra desde la sombra del departamento de un primer piso. Afuera es de día y el calor hace de la tarde un animal espeso, que se arrastra. Adentro del edificio es igual: el aire es denso, huele a podrido. El sudor es inevitable.
Las moscas también. Alguien ha dejado al perro ahí, con la puerta entreabierta para que un vecino le dé de comer. El dueño de la mascota abandonó, como tantos, su casa. La falta de energía eléctrica generó un pequeño éxodo en muchos barrios de la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano.
Los vecinos van a parar a casas de amigos y parientes. Pero también están los que se resisten a abandonar su hogar porque no tiene dónde ir o porque les parece injusto abandonar su lugar.
Ayer fue el decimotercer día consecutivo de altas temperaturas -el termómetro tocó los 38 grados- y cortes de luz, un combo que sigue generando angustia y bronca entre los afectados. Algunas zonas de los barrios porteños de Recoleta, Caballito, Almagro, Villa Crespo, Villa del Parque, Devoto, Urquiza, Paternal y Mataderos, y en el GBA, como Lanús, Avellaneda, Victoria, Vicente López, Olivos, Munro, Ramos Mejía, Hurlingham y Ciudad Jardín, sufrieron cortes de energía.
La gente reaccionó. A la mañana, en Villa Lugano y Villa Crespo, los vecinos cortaron la autopista Dellepiane. Otros hicieron un piquete en Corrientes y Serrano, y en Juan B. Justo y Trelles. En Villa Domínico bloquearon las vías del Roca.
Por la tarde, hubo nuevos cortes en Flores, Gerli y Lanús, donde la gente intentó prender fuego una oficina de Edesur. Esa empresa avisó que ayer puso en marcha un operativo junto con Aysa para facilitar la provisión de agua potable en los edificios de departamentos que no cuentan con electricidad a causa de los cortes. El operativo consiste en el traslado de grupos electrógenos de Aysa junto con una cuadrilla de Edesur que se encarga de dar electricidad a las bombas que llevan el agua desde las cisternas a los tanques de los edificios.
Tarde. Daniel, vecino del 6° B del complejo de Bacacay 2685, en Flores, juntó agua en la bañadera para descargar el inodoro, asearse, cocinar y lavar algún plato. Pero se le acabó el agua y la paciencia, y mandó a su hija y a su mujer a Misiones. "No podía tenerlas así. Yo puedo aguantar pero ellas, no. Llevamos cuatro días sin luz", dice Daniel, parado en el living del departamento de Oscar y Estela.
Oscar es paciente oncológico y debe aplicarse una inyección cada 28 días. "No puedo dejar que la medicación pierda la cadena de frío. Pude preservarla un par de días pero ya es imposible", cuenta el hombre mientras Estela, indignada, enumera: "Tiré asado, leche, yogur, queso, manteca, crema". En la conservadora de frío que llevarán a lo de su hija -adonde se mudarán quién sabe hasta cuándo- asoman las cabezas doradas de dos botellas de sidra. Es lo que quedó de Nochebuena, algo que para ellos fue una recreación de la última cena: a la luz de las velas.
En la cuadra donde viven Daniel, Oscar y Estela, hay dos geriátricos sin luz, una mujer con un hijo discapacitado y también Silvia y Juan, una pareja de jubilados que se empapó en toallones para tirarse a dormir en el balcón y soportar el calor. "Hasta que se nos acabó el agua que teníamos de reserva. Nos vamos. Estamos hartos", dice Silvia.
Cada tanto en ese pedacito del barrio de Flores se escucha el rugir de los generadores de energía. Son pequeños y están conectados precariamente. Un cable negro, un alargue desde la casa de sus vecinos alimenta la heladera y el ventilador de pie de Tito.
Y nada más. Carla es la mamá de Liam y dejó su casa porque la leche para el nene se pudría. "Me instalé en lo de mi papá y también se cortó", explica Carla. Su familia es dueña de una verdulería en Directorio al 3.600. Las heladeras están apagadas. "No hay frío, no hay venta", apunta Carlos.
En Palermo viven el mismo drama. Mauricio tiene 73 años y está operado de ambos pulmones. Le cuesta respirar y habita el piso once de un edificio en Serrano al 400. "Esto es lo más cercano a una tortura", se lamenta. Margarita vive en Juan B. Justo y Trelles. Hace un mes le amputaron la pierna y tiene que ir al hospital dos veces por semana. ¿Cómo la trasladan? La atan a una silla con sábanas y a la silla la amarran con sogas. Así la llevan hasta la planta baja desde el tercer piso.

jueves, 26 de diciembre de 2013

Remedios de Escalada Oeste sin LUZ

Hoy, desde las 00,05 hs y hasta las 08,15 hs estuvimos sin energía eléctrica

Es decir, sin LUZ

Esto está hecho bien a propósito

Había una iluminación perfecta en las luminarias de las calles

Pero los vecinos tuvimos que soportar un calor infernal y sin ventiladores, sin poder dormir ni siquiera en los jardines, por la intensa ola de calor y por culpa de EDESUR

No les importa la edad de personas mayores ni de bebés

Y edificios de varios pisos sin ascensores, ni agua, ni nada habitable

También zonas con falta de agua potable

Por supuesto con las mejores recomendaciones de los vecinos-usuarios hacia los culpables y responsable, ahora irresponsables, que son:  EDESUR y el ENRE

Cecilia Voro

Una fuerte explosión en un transformador deja sin luz a 1.500 viviendas y comercios del centro

http://www.elcomercio.es/v/20131224/aviles/fuerte-explosion-transformador-deja-20131224.html

Decenas de vecinos de los números 44 y 46 de Fernández Balsera salieron a la calle en la noche del domingo en pijama tras escuchar una «tremenda» detonación

24.12.13 - 00:26 -

C. DEL RÍO | AVILÉS.

En Tuenti

«Fue una explosión tremenda». Un «zambombazo», en palabras de otro testigo, que el domingo llevó a numerosos inquilinos de los números 44 y 46 de la calle de Fernández Balsera a abandonar sus viviendas alrededor de las once de la noche tras quedarse a oscuras, percibir un olor a quemado y escuchar una «gran explosión». El origen estaba en el centro de transformación que la empresa HidroCantábrico tienen en el pasadizo entre las calles de Fernández Balsera y Claudio Luanco, a la altura del Carbayedo, que sufrió una avería, tal como confirmó la empresa.

La «tremenda» detonación puso en alerta a todos los vecinos de ambos bloques, muchos de los cuales tras quedarse sin luz eléctrica en sus viviendas, optaron por salir a la calle y conocer el alcance de lo sucedido de primera mano.

Pepita Gómez fue una de las primeras en bajar. Estaba recogiendo la cena cuando «aquella explosión tremenda» y la caída de la luz la sobresaltaron. Se asomó a la terraza, comprobó que la avería era generalizada y vio llegar «casi de inmediato» a la Policía Local, no así los bomberos «que tardaron más de media hora». Bajó a oscuras las escaleras del edificio, donde también comenzaron a saltar las luces de emergencia, y salió al pasadizo en el que se encuentra el transformador. Lo mismo hizo José Luis Fernández Pinedo, residente del mismo bloque, que ayer subía comentando el incidente con una convecina, Aida. «Salía una gran humareda del transformador pero enseguida se fue desvaneciendo». No obstante, el apagón de luz duró unos veinticinco minutos, según estiman tanto los afectados como la empresa. Pinedo confirma que la mayoría de los vecinos bajó hasta el portal, pero no su contertulia de por la mañana porque «pregunté desde la ventana a la Policía y me dijeron que podía quedarme en casa, que no había peligro».

Al final fueron 1.500 puntos de suministro, es decir, clientes tanto particulares como empresas, los afectados por la avería del centro de transformación.

Teresa Álvarez, residente en el número 46 de Fernández Balsera, sintió dos explosiones. «Yo no bajé, lo vi todo desde casa», tranquilizada por los conocimientos de electricidad de su marido que, tras la sobresalto inicial, quitó importancia a lo sucedido.

Al final, todo se quedó en un susto y en veinticinco minutos sin luz que ayer dieron para mucha tertulia.

miércoles, 25 de diciembre de 2013

Siguen los cortes de luz en medio temperaturas sofocantes

Vecinos de Devoto, Almagro, Caballito, entre otros barrios, pasaron la nochebuena a oscuras. En Flores denunciaron falta de suministro desde hace 11 días.

IMÁGENES

Vecinos Paraná al 1200 toman aire en la vereda porque continúan sin luz. (DYN)

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25/12/13 - 15:44 - Clarin

Una nochebuena a oscuras y con calor insoportable. En el mismo tono que desde que arrancó la ola de calor hace más de una semana, muchos vecinos de distintos barrios de Capital debieron soportar cortes de electricidad y muchos ya llevan hasta 11 días sin luz.

Tal es el caso de vecinos de Argerich al 900 en Flores, que denuncian que persisten los fallos en el suministro eléctrico, tal cual lo había adelantado Edesur en el medio de una sofocante ola de calor con temperaturas de hasta 38 grados.

“Nosotros desde septiembre venimos sufriendo cortes que no son para nada programados”, se quejó en televisión un vecino, quien dijo que el problema es “más de una manzana”. “Hay una caja en Helguera y Páez que la fase no funciona y Edesur no puede desconocerlo”, sentenció el damnificado.

Otra mujer de Flores contó su dramático problema: es insulino-dependiente y los cortes ponen en riesgo su vida. “Ya perdí tres tubosde insulina y como no te visan que van a cortar no los pude salvar. Nopuedo estar sin heladera o sin alimentos porque de noche puedo sufrir hipo e hiper glucemias graves y conseguir insulina nueva no es fácil”, explicó.

Muchos vecinos afectados volvieron a salir de madrugada tras el brindis de las doce para protestar por una situación que ni las autoridades, ni las eléctricas que operan en la zona les resuelven.

Las redes sociales sirvieron también de plataforma en la que los usuarios manifestaron su malestar e informaron de los fallos eléctricos que todavía se extienden en varios barrios porteños como Devoto, Almagro, Villa Ballester, Villa del Parque, Flores, Caballito, Barracas y Villa General Mitre.

“Olavarría al 500 !!! seguimos sin luz y sin respuestas!! Lamentable!!!!”, escribía en su cuenta de Twitter un vecino de La Boca, otro de los barrios afectados por los cortes de energía.

Por su parte, desde Edenor solicitaron a los usuarios un "uso racional de la energía" para evitar más problemas. "Dado que hace 11 días que no afloja la ola de calor, quiero pedir un uso racional de la energía, que sean solidarios. Evitemos el derroche", dijo Alberto Lippi, portavoz de la empresa.

La respuesta de ambas compañías llegó después de que el Gobierno Nacional las culpó por las fallas, les exigió una inmediata solución, amenazó con multas y hasta reestatizar el servicio.

Durante las protestas por los cortes llegaron a producirse hechos muy violentos. Ayer, un hombre de 40 años murió luego de ser baleado cuando protestaba. El autor de los disparos, un policía de tránsito, fue detenido y suspendido.

domingo, 22 de diciembre de 2013

El calor no afloja y todavía hay usuarios que siguen sin luz

En más de 60 ciudades la temperatura superó los 30 grados. El récord fue en Río Negro.

IMÁGENES

La Paternal. Avenida Juan B. Justo y Trelles, ayer, cortada por vecinos que llevan 6 días de cortes. / GUILLERMO R ADAMI

22/12/13 – Clarin

Qué calor. Dos palabras con un peso insoportable que se propagaron ayer por casi todo el país. De acuerdo con los registros del Servicio Meteorológico Nacional, hubo más de 60 ciudades con temperaturas por encima de los 30 grados, desde Río Negro hasta Jujuy y desde Mendoza hasta Corrientes. Y está previsto que la ola de calor siga al menos hasta la noche del martes 24.

¿Hay luz? Otras dos palabras con una gran carga de fastidio que siguen circulando por muchos barrios de la Capital Federal: Caballito, Villa del Parque, Barrio Norte, Belgrano, Balvanera, Almagro y Retiro seguían ayer sin luz y con reclamos en las calles. A pesar de los operativos especiales de las empresas prestadoras del servicio de energía eléctrica, todavía quedan muchas cuadras que no tienen luz ni agua desde hace seis días, o que sufren cortes intermitentes desde que el calor afecta a casi todo el país.

Ayer Edesur pidió “disculpas” a sus clientes a través de una solicitada, y también informó que mantiene un servicio de asistencia técnica durante las 24 horas, todos los días de la semana, “incluidos los de las fiestas de fin de año”.

“A raíz de la situación climática –dice la solicitada–, estamos enfrentando la mayor demanda de energía eléctrica de la historia. En este contexto se registran interrupciones en el suministro que estamos trabajando para resolver con todos los recursos disponibles, una mayor cantidad de personal en la calle, la puesta en servicio de grupos electrógenos y el incremento de la atención telefónica”.

Desde que llegó la ola de calor, se siguen marcando nuevos récords de consumo de energía. Ayer se superó el registro para un sábado, con 20.605 megavatios. Y la marca más alta se había registrado el sábado pasado, con 20.287 mw.

Sin embargo, ni las disculpas públicas ni el esfuerzo extra de las empresas alcanzan para compensar el malhumor de los vecinos. Ayer hubo cortes de calle en varios puntos de la Capital Federal: en Juan B. Justo y Donato Alvarez, Belgrano y Dean Funes, Rivadavia y Boedo, Don Bosco y Maza, y Pueyrredón y Beruti, entre otras esquinas. En Villa Devoto, un grupo de vecinos organizó un sistema de asistencia para un vecino que fue operado del corazón y que no puede bajar las escaleras. A través de un sistema de poleas, lograron subirle bidones de agua hasta su departamento, en el quinto piso.

Los vecinos reclaman también porque la previsión es que siga el calor y siga habiendo una gran demanda del sistema de energía. El servicio de alerta del Servicio Meteorológico siguió ayer en color “amarillo” para Capital Federal, aunque fue elevado a “naranja” para Rosario y alrededores.

Ayer, en esa ciudad, el termómetro llegó a marcar 34,5 grados. Las altas temperaturas seguirán al menos hasta el martes 24 en todo el norte de la Patagonia y el centro y norte del país. Según advirtió el Servicio Meteorológico, “debido al ingreso de una masa de aire relativamente más fresca a partir del martes 24 por la noche, se preve que las temperaturas disminuyan levemente”.

De a poco vuelve la luz, pero sigue la bronca de los vecinos

POR DIEGO GEDDES-Clarin

Ayer hubo 12 horas de corte en Retiro. Dicen que el servicio se normalizará hoy o mañana.

La fila a contraluz. Un grupo de pasajeros espera a oscuras, ayer, en la Terminal de Retiro. El corte de luz complicó la salida de los micros en el arranque del éxodo por Navidad. /LUCIANO THIEBERGER

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21/12/13-Clarin

Una lamparita que había quedado encendida. El motor de la heladera que vuelve a zumbar. La bomba de agua de un edificio, que se pone en marcha para subir agua a los tanques. Así, en pequeñas pero significativas escenas, se verifica la vuelta del suministro eléctrico en muchos barrios de Capital y el GBA. A una semana de la ola de calor que derivó en un colapso energético, la situación tiende a normalizarse, y según prometieron voceros de las empresas prestadoras del servicio, no habrá usuarios sin luz durante el fin de semana.

Sin embargo, hasta ayer había vecinos que denunciaban la falta de luz en los barrios de Recoleta, Mataderos, Caballito, Saavedra, Barrio Norte, Retiro, Paternal, Palermo, Constitución, Parque Chacabuco y Floresta, donde en avenida Segurola al 1700 ayer fue el quinto día sin luz y los vecinos cortaron esa arteria.

También en zonas de la Provincia, como Lanús, Olivos, Vicente López, Ramos Mejía y Guernica faltó energía.

Incluso un corte de energía en la terminar de Retiro afectó a los pasajeros hasta el mediodía de ayer, en el arranque del éxodo por las Fiestas.

En Villa Ortúzar, otro de los barrios afectados, un grupo de vecinos que estaba sin luz ni agua desde hace cinco días, montó una guardia y bloqueó la salida de una cuadrilla de operarios de Edenor que estaban arreglando una central de abastecimiento.

Los vecinos cruzaron los autos en la cuadra e impidieron la salida hasta tanto volvieran a tener energía eléctrica. Mientras los operarios de Edenor trataban de solucionar el problema, la empresa aclaró que no podía colocar un generador para dar luz temporariamente porque “un cable dañado lo impide”.

En la terminal de Retiro, la falta de suministro de energía comenzó a la 0.30 de ayer y desde entonces gran parte del predio estuvo a oscuras. Los problemas afectaron, especialmente, la compra y venta de pasajes ante la ausencia del sistema para gestionarlas. Los bares y los negocios de la terminal optaron por no abrir y en la oficina de migraciones la cola alcanzó los 200 metros.

Pese a los inconvenientes, la terminal intentó funcionar con normalidad, con entradas y salidas de ómnibus de los pasajeros que ya tenían comprado con antelación el boleto. El servicio se restableció cerca del mediodía y produjo una reacción inmediata: pasajeros y comerciantes aplaudieron.

Informe: Mariano Gavira

De indignados a resignados

POR MARCELO BIRMAJER – Clarin

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20/12/13-Clarin

V ivíamos en un mundo eléctrico, todo dependía de la electricidad; y de repente, se fue. Todo dejó de funcionar y no estábamos preparados. El miedo y la confusión dieron paso al pánico. Los más afortunados escaparon de las ciudades. Cayeron los gobiernos. Las milicias tomaron el poder controlando los alimentos y acaparando las armas. Seguimos sin saber la causa del apagón, pero esperamos que aparezca alguien y nos muestre el camino”.

Con este acápite, comienza la serie televisiva de ciencia ficciónRevolution, cuyo argumento es un futuro sin energía eléctrica. Si la serie se hubiera filmado en estos días en Buenos Aires, más que Revolution debería haberse llamado Resignation.

El pasado miércoles, en el Once, a la falta de energía se le sumó la falta de seguridad; por un rumor de saqueos, cerraron la mayoría de los negocios entre Corrientes y Pueyrredón, al menos hasta Agüero, en varias cuadras a la redonda. Sólo el shopping seguía funcionando con normalidad. Esa ciudad de cielo plúmbeo, al borde de la lluvia, se parecía mucho más a un pasado patéticamente costumbrista que a un futuro apocalíptico. La imagen de los ancianos deshidratados, las madres limpiando a los bebés en el planta baja, y los patrulleros yendo y viniendo con sus asientos traseros ocupados por tríos de sospechosos, no era el divertimento de una ciudad satisfecha que imagina una pesadilla, sino la más prosaica realidad argentina, en los ochenta, en los noventa y en la “década ganada”.

Vale la pena leer los house organ del oficialismo, ya sea en su versión gratuita o paga: no pueden dejar de admitir los cortes de luz y los saqueos pero, literalmente, “no tienen nada que ver” con los de los ochenta, con los de los noventa ni con los del 2001. Incidentalmente presencié, igual que en diciembre del 2001, la pantomima de un individuo con handy, en la parada de colectivo, advirtiendo a los gritos a un supuesto interlocutor que se acercaban los saqueadores. ¿Quién le paga a ese farsante, con qué finalidad?

Pero el oficialismo tiene dos lentes para mirar las mismas situaciones. Las plumas pagadas por el Gobierno se burlan despiadadamente de Fernando de la Rúa marchándose en helicóptero de la terraza de la Casa Rosada, y con la misma tinta advierten sin rastros satíricos que los resabios de la dictadura quieren desalojar a la Presidenta de su sillón. Deberían incorporar una mínima coherencia en sus percepciones: o bien se lamentan por el destino de De la Rúa, o bien admiten que los saqueos y los cortes de luz demuestran más la incapacidad del que gobierna que la capacidad de sus enemigosnunca identificados. En realidad, hay algunos resabios de la dictadura a los que tienen perfectamente identificados, como el actual jefe del Ejército, César Milani.

En 30 años de democracia hemos conseguido fortalecer las instituciones, lograr que el Ejército dejara de ser una amenaza para la República, considerar inaceptable la violencia política y salir de cada una de nuestras crisis por medio del voto y los mecanismos legales oportunamente diseñados para emergencias; pero no fuimos capaces de garantizar la energía eléctrica, ni el bienestar mínimo de las capas más desprotegidas de la población. El kirchnerismo puede contratar a todos los intelectuales y marketineros de habla hispana, pero no encontrarán la metáfora para quitarse la responsabilidad de este fracaso colectivo y perdurable.

Cuando los cortes programados de mediados y fines de los ochenta, la empresa eléctrica, SEGBA, era estatal. Ya se escuchaban las primeras voces que preguntaban si quizás no sería más efectiva una empresa privada o mixta. A fines de los noventa, cuando el Once permaneció durante once días sin luz, mientras los heladeros arrojaban litros de un líquido pastoso, con tonos pastel multicolores, los vecinos se preguntaban si el Estado había controlado debidamente a la empresa privada, mientras que la izquierda repartía periódicos clamando por el regreso a la empresa estatal que había protagonizado los cortes programados de los ochenta.

Nunca entendí por qué un Estado incapaz de hacer un seguimiento a una empresa privada para que brinde luz de forma ininterrumpida sería capaz de reemplazarla en ese mismo servicio. El sentido común indicaría que supervisar habría de ser más fácil que proveer; y que de una buena supervisión surgiría la anticipación, y la reparación previa al daño, no varias semanas o meses posteriores. La experiencia, y el recurso a echarle la culpa a la empresa concesionaria, data de fines de los noventa, ni siquiera del recurrente 2001; no casualmente muchos de los actuales funcionarios estaban también en el poder, en el peronismo de variante menemista. La falta de aprendizaje contemporáneo es exclusiva responsabilidad de los actuales mandatarios.

A fines de los ochenta, durante los cortes de luz programados, publiqué en un matutino porteño la historia de un hombre que se perdía en un edificio a oscuras, durante un corte ni siquiera anunciado. A fines de los noventa, en el mismo matutino, por entonces opositor, escribí la nota de tapa del suplemento cultural sobre esos días sin luz en el Once; porque el corte, de tan inusitado y prolongado, entraba en la categoría de aguafuerte casi ficticia. Ahora lo que percibo en los vecinos, aunque son las mismas llamaradas en las esquinas de San Cristóbal, sobre la avenida Independencia, sobre la avenida Entre Ríos, las mismas gomas quemadas, los mismos rostros, camisetas y shorts de baño, es resignación. Ya ni siquiera la noticia o la postal tienen el impacto de lo inaudito. Los líderes, de la Nación, de la Ciudad, de la oposición, no han sabido encontrarse con esta demanda; ni para anticiparse al fracaso, ni para enfrentarlo con una solución de emergencia. ¿Por qué ciertos vecinos pueden arreglarse con generadores, u oficiar como técnicos eléctricos de ocasión y conectarse a tal o cual fase, legalizando el cuelgue frente al desamparo; mientras que el Estado y las variantes políticas no son capaces de reaccionar siquiera con alivios de ocasión? ¿Generadores, dinero, agua; realmente no hay ningún modo de acompañar a los vecinos en este trance desesperante?

Son por lo menos siete días sin luz para barrios enteros; y sin ascensor ni agua para otros tantos. El Gobierno, en su casa, con luz, agua y aire acondicionado. La empresa, con las puertas cerradas por temor al reclamo de los usuarios. La clase política, silente, preparando el veraneo.

Como detesto de un modo visceral el excremento de perro en las calles, cada vez más profuso e insufrible, y ante la incapacidad completa de los funcionarios municipales para ponerle coto a esta desgracia, muchas veces me he preguntado si quizás resistir a una invasión extranjera o llegar a la Luna resulte, por lo extraordinario, más sencillo que la prosaica tarea de mantener las calles libres de excremento. En la vida individual ocurre a veces que una epopeya nos resulta más alcanzable, en un corto período, que la manutención continuada de nuestro bienestar diario. Pero cuando se corta la luz, no hay agua ni ascensor, y además esquivo excrementos entre las calles mugrientas, finalmente me respondo que nuestros gobernantes electos no están a la altura de las responsabilidades para las que se postularon.

N. de R: La columna de Jorge Lanata volverá a publ

sábado, 21 de diciembre de 2013

Cómo reclamar por pérdidas tras los cortes de luz

 

En el año 2010, mes de Diciembre, expliqué con copia de mis comprobantes personales, todos los trámites que tuve que hacer y cuando me pagaron algo. Ocurrió más de un año después. En este Blog podés buscar mis explicaciones día a día

Se requiere mucha paciencia, mucho tiempo, muchos comprobantes

Daniel H Spagnolo

 

Ahora la nota del Portal amigo

Los cortes de luz ocasionaron, además de horas de interminable calor, la pérdida de maquinaria y mercadería de trabajo. Cómo tramitar el pedido de indemnización ante las empresas.

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A los días y noches de interminable calor que provoca la falta de luz, muchos vecinos perdieron electrodomésticos, mercadería y máquinas de uso laboral. Para todos aquellos que se vieron perjudicados por los cortes de luz, INFOnews brinda toda la información necesaria para hacer los reclamos ante las empresas proveedoras de electricidad.

De acuerdo a lo precisado por Héctor Polino, fundador y representante legal de Consumidores Libres, los usuarios con pérdidas deben:

-Reunir la mayor cantidad de pruebas necesarias que acrediten el monto del perjuicio ocasionado (conservar electrodomésticos y maquinaria dañadas).

-Presentar ante la oficina de consumidores de la empresa correspondiente (Edenor, Edesur o Edelap) una nota detallando quién es el titular, domicilio y desarrollo de los daños ocasionados. La nota debe ser presentada por duplicado –se sella y el usuario se queda con una de las copias- y debe estar dirigida al gerente.

- Adjuntar a esa nota tickets, facturas y todo documento que acrediten los daños ocasionados y la propiedad de quien reclama.

-Una vez iniciado ese reclamo, el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) puede intervenir intimando a las empresas a que se hagan cargo de las pérdidas ocasionadas por el corte en la prestación del servicio.

-Quienes se vieron afectados por los cortes de luz, pero no perdieron electrodomésticos ni mercadería, igual pueden presentar el reclamo y es posible que reciban una indemnización.

“Es un trámite complicado, pero en varias oportunidades logramos que el resarcimiento se concrete” aseguró Polino a este medio, en referencia al curso de los reclamos. Sucede que el ENRE es un organismo público integrado por asociaciones de consumidores y una vez formalizado el reclamo ante las empresas, el organismo puede intervenir intimando a una indemnización.

Ante cualquier consulta comunicarse al ENRE: 0800-333-3000 o dirigirse a Suipacha 612

También puede suceder que la cifra indemnizatoria fijada por en ENRE para que paguen las empresas sea menor a la que demanda el usuario damnificado. En ese caso el usuario podrá continuar su reclamo ante los organismos de defensa al consumidor.

Ante cualquier consulta comunicarse al ENRE: 0800-333-3000 o dirigirse a Suipacha 612 (de lunes a viernes, de 9.00 a 18.00). Y por reclamos por cortes vía SMS escribir a Nombre de la distribuidora responsable [ESPACIO] Número de usuario [ESPACIO] 3 últimos números del medidor. El sistema desarrollado por el ENRE procesa el SMS, le asigna un número de reclamo (que luego envía al teléfono móvil del usuario), y notifica el corte a la distribuidora responsable.

El viejo truco de cargarle la mochila a otro

POR ALCADIO OÑA – Clarin - 20/12/13

El Gobierno ya no sabe como sacarse la brasa caliente de encima. Culpar a las distribuidoras por los traumáticos cortes de luz es un recurso conocido, aunque esta vez hubo un par de novedades: una fue que la tarea le tocó a Jorge Capitanich y la otra, que el jefe de Gabinete las amenazó públicamente con quitarles el servicio.

Comentario de cajón: si las compañías no invirtieron para garantizar el abastecimiento de electricidad, ¿en qué andaba el Estado regulador que tanto exalta el kirchnerismo?

Las distribuidoras alegan, hace tiempo, que con las tarifas congeladas han quedado al borde de la quiebra. Y se sabe que al menos una de ellas llegó a ofrecerles las llaves al Gobierno: quizás ahora le acepten el convite.

La contrapartida es que una salida así pondría el problema directamenteen cabeza del poder político. Entonces, ya no habrá manera de pasarle responsabilidades propias a otro.

Y según ha dicho el propio Julio de Vido las desventuras no desaparecerán: “Este verano vamos a estar 1.500 kilovatios arriba del verano anterior y la posibilidad de corte se va a incrementar por mayor consumo”. Todo muy alentador: vamos mal y seguiremos mal.

¿Nadie pensó en que si algo semejante podía suceder era necesario tomar las precauciones que el panorama exigía? La respuesta está a la vista. No lo hizo el ministro que teóricamente debe ocuparse de la planificación, ni Axel Kicillof, a quien la Presidenta puso al mando de la estrategia energética hace más de un año.

De Vido y Kicillof se llevan mal, pero ese no es un problema de la gente que sufre los cortes sino del modelo de gestión de la propia Cristina Kirchner. Las internas feroces son un sello de gobierno.

“En lugar de pelearse, revolear amenazas o actuar como comentaristas, debieran estar imaginando qué hacer ahora mismopara paliar los efectos de una crisis estructural”, dice un especialista. Propone armar un gabinete de emergencia “con personas que entiendan”, pero de inmediato desecha la idea, “porque asumir los problemas está contraindicado en el manual K”.

Y entonces, ¿qué?, le pregunta Clarín.

La respuesta: “Yo ya le habría consultado a Brasil si tiene una reserva de electricidad de 1.500 kilovatios o algo parecido a lo que nos faltaría durante el verano. También estaría buscando generadores y transformadores potentes para salir del paso”.

Existe una falla grande en el sistema, si los cortes sacuden a los usuarios de la Capital y el Conurbano. Porque en el universo kirchnerista los ruidos y los costos políticos deben sonar lo más lejos posible.

Qué duda hay de que la industria volverá a cargar con la mochila de la dieta eléctrica.

La actividad industrial y el trabajo industrial.

Mientras tanto, palabras. Capitanich intentó explicarle a la gente que todo pasa porque la economía crece, porque cae el desempleo y porque “el modelo pone el ojo en el consumo”.

Más que un argumento parece una ocurrencia fuera de lugar, porque en el punto más extremo eso significa que, en cualquier momento del recorrido, el país puede tropezar con un apagón generalizado.

Responsable de los Cortes

Cuatro datos clave de la responsabilidad del Estado

POR ANTONIO ROSSI-Clarin - 20/12/13

El intento del Jefe de Gabinete, Jorge Capitanich de poner al Gobierno en el papel de “víctima” y casi sin ninguna responsabilidad en el tema de los cortes de luz carece de sustento y deja en “off side” a los funcionarios del sector eléctrico.

Si bien la “prestación del servicio” está a cargo de Edenor y Edesur con contratos de concesión que prevén multas y castigos en caso de incumplimientos, hay cuatro datos clave de la realidad que marcan claramente la responsabilidad del Gobierno.

En primer lugar, los contratos vigentes con las distribuidoras fueron renegociados por la administración kirchnerista en 2006. Entre otras cláusulas, incluyeron una “actualización periódica” de los costos operativos que las autoridades reconocen con demoras y una “revisión tarifaria integral” (RTI) pendiente desde hace cinco años.

En segundo lugar, la ley 24.065 establece que el Ente Regulador de la Electricidad (ENRE) –que depende del ministro de Planificación, Julio De Vido y controla a Edenor y Edesur– tiene entre sus funciones principales las de “incentivar y asegurar la eficiencia de la oferta y la demanda de energía por medio de tarifas apropiadas y alentar las inversiones privadas en producción, transporte y distribución”.

El tercer dato relevante es que el Gobierno tiene desde mediados de 2012 una injerencia concreta en el manejo de Edesur.

La empresa esta intervenida por el actual vicepresidente del ENRE, Luis Barletta, quien con un equipo de 20 asesores revisa y aprueba todos los gastos con el fin de “garantizar la provisión del suministro eléctrico”.

En cuarto lugar, ha sido el propio Gobierno el que en noviembre de 2012estableció un nuevo “cargo específico” para financiar el “Programa de Obras de Consolidación y Expansión de las Redes de Distribución”.

Dicho cargo –que los clientes residenciales oscila entre los $ 4 y $ 150 por bimestre– recauda $ 1.000 millones anuales que las distribuidoras tienen que destinar solo a las obras y arreglos que indiquen los funcionarios. Para monitorear esas obras y atender reclamos de usuarios, se montó otro ente de contralor paralelo al ENRE que depende del radical K, Marcelo Montero con personal contratado por medio de las universidades de San Martín y Lomas de Zamora.

Ya se quedaron sin energía todos los barrios, menos Puerto Madero

POR EZEQUIEL VIÉITEZ-Clarin

Ayer faltó el servicio en más de 40 barrios de la Capital y el GBA. Y hubo piquetes en varias esquinas porteñas.

20/12/13-Clarin

Hubo hasta ahora un solo barrio en el que no se cortó la luz ni los vecinos salieron a protestar: Puerto Madero. En el resto de la Capital, desde el lunes, ninguna otra zona se salvó. Según un relevamiento que hizo Clarín, ayer todavía se sufrieron interrupciones del servicio en más de 40 barrios porteños y del GBA. Algunos vecinos sumaban seis días sin energía. Sin embargo, con el correr de las horas, en muchos puntos se iba restableciendo el servicio.

“Puerto Madero es un barrio nuevo, con redes de media y baja tensión de pocos años, por eso es natural que no hayan tenido problemas”, explicó el ex secretario de Energía Emilio Apud. Es justamente desgaste de las instalaciones eléctricas en el resto de la Ciudad lo que provoca los apagones.

Y se repitieron los reclamos. Una de las protestas más fuertes ocurrió en avenida Córdoba y Larrea, en Balvanera. Allí, unos 20 vecinos cortaron la calle. A partir de las 17 fue un caos, a pesar de que enseguida dos carriles de Córdoba estaban liberados. Efectivos de la Policía Federal intentaban facilitar el paso de colectivos, taxis y automóviles, mientras los manifestantes golpeaban tachos de basura y cacerolas. Un cartel escrito a mano advertía: “Sin luz desde el lunes”. En la avenida se formó un embotellamiento de más de diez cuadras en la hora pico. “No me gusta hacer esto, pero no me queda otra”, dijo Alfredo, que había bajado desde su departamento a cortar la calle.

El enojo también se hizo escuchar en otros puntos. En distintos horarios, grupos reducidos de vecinos cortaron el tránsito en San Martín y Gaona (Villa Crespo), Rosario y Senillosa (Caballito), San Juan y Alberti (San Cristóbal), San Juan y Salta (Constitución), Paso y Viamonte (Balvanera), Gascón y Guardia Vieja (Almagro) y Asamblea al 600 (Parque Chacabuco). A dos cuadras de la residencia de Olivos, en Ugarte y avenida Maipú, ocurrió otro corte de calle, que no duró mucho. Además, siguieron las denuncias por falta de luz en Floresta, Mataderos, Flores, Devoto, Belgrano, Chacarita, Recoleta, y San Cristóbal, entre otros barrios. La Subsecretaría de Tránsito porteña informó que ayer aún quedaban 42 cruces de calles con los semáforos fuera de servicio.

El Conurbano se mantuvo en la misma sintonía. “Desde la semana pasada, cuando comenzaron las interrupciones, hubo problemas en unas 10 mil viviendas”, informó el encargado de Defensa del Consumidor de Vicente López, Pedro Cessani. En Florida Este, durante la mañana, los vecinos hicieron piquetes sobre las vías de la línea Mitre, lo que complicó el servicio del tren. Además, hubo cortes de luz –en algunos casos temporarios– en Munro, Villa Martelli, Villa Maipú, Quilmes, Berazategui, Banfield, San Justo, Ramos Mejía, Tigre, Ituzaingó, Morón, Hurlingham, San Martín, Caseros, Villa Bosch, Martín Coronado, Santos Lugares, Sáenz Peña, Lanús, Monte Chingolo, Gerli, Escalada, Don Bosco, Ezpeleta, Villa Insuperable, Atalaya, Casanova y Bella Vista.

En ese clima, como pudieron, en las compañías eléctricas intentaron moderar las críticas de los usuarios. En Edenor indicaron que “las mil cuadrillas de la empresa” seguían en la calle trabajando y que los cortes “nunca se generalizaron”. Voceros de Edesur, por su parte, aseguraban ayer a última hora que para el final del día esperaban llegar a solucionar el 99% de los cortes que se denunciaron en la semana.

Informe: Zonales Clarín

viernes, 20 de diciembre de 2013

Sin luz, pero con tecnología

La falta general de electricidad en un hogar no se puede suplir en forma casera (no sin una inversión importante), pero van aquí algunos consejos para que la informática hogareña sobreviva de la mejor manera posible al verano porteño y, si es posible, nos de una mano frente al calor y la oscuridad.

Los clásicos
Las notebooks tienen una batería propia, y si se corta la luz en forma imprevista igual podremos terminar de escribir ese trabajo o de ver la película. Pero en el caso de una PC de escritorio eso no sucede. Si es un equipo clave, un UPS será una solución. Es, grosso modo, una batería para computadoras (y otros dispositivos). No sirve para trabajar durante horas -no, al menos, los modelos económicos- pero sí para poder guardar el trabajo que estábamos realizando y apagar la computadora en forma ordenada. Precio: de 800 pesos para arriba, según la capacidad que deban tener (medida en VA, voltio ampere, que no equivale al watt pero tiene un factor de conversión aproximado de 0,65; lo explicamos en detalle en esta nota ). El UPS sirve también para otros electrodomésticos.

Alternativa: el estabilizador de tensión. No tiene batería, pero evita el daño a los equipos eléctricos si la tensión sube y baja. En rigor, habría que usarlo todo el año. Viene con varios enchufes, y como en el caso de los UPS tiene una capacidad de estabilización que depende del modelo. Precio promedio: 200 pesos para uno de 1000 VA de capacidad. Hay que calcular lo que consume el monitor, la computadora, etcétera, indicado en las etiquetas donde muestra con qué normas y estándares es compatible, etcétera. Lo razonable es dejar afuera lo que consume mucho (una impresora, por ejemplo) o lo que no es vital (parlantes).

Una más, obvia pero necesaria. Los que tengan notebooks, tabletas o smartphones deberían tratar de mantenerlos siempre cargados, por las dudas de que el corte de luz se extienda por largo tiempo.

Otro clásico: viento y sol
Tenemos luz, pero mucho calor: las computadoras, a su modo, lo sienten tanto como nosotros; cuando trabajan generan calor y necesitan enfriarse. Si los ventiladores de la PC (los coolers , como se los conoce también por su nombre en inglés) están andando a máxima potencia todo el tiempo, es momento de evaluar si no se podrá postergar ese juego para más tarde. También, invertir en un tubo de aire comprimido (120 pesos en casas de computación) para limpiar de polvo los ventiladores y facilitar su trabajo.

Hablando de calor: nunca es aconsejable dejar un dispositivo electrónico al sol, pero el del verano es peor. La guantera del auto -si éste quedará en la calle o al sol- es un pésimo lugar para guardar el celular o la notebook.

Vivir en la nube
Si tiene que trabajar sí o sí con un archivo almacenado en la PC (y no es una notebook, claro), es clave configurar, en la aplicación correspondiente, el autoguardado cada cinco minutos o algo así, para perder la menor cantidad de información posible si se corta la luz.

Alternativa: apelar a un servicio online. Si se necesita un Office, tanto Microsoft como Google tienen alternativas gratis, que guardan cada cambio en forma automática y lo almacenan en línea. Esto significa que si se corta la luz se puede ir a lo de un amigo o un locutorio y seguir trabajando.

Otra opción son los discos online tipo Dropbox, Box, Drive, Skydrive y demás , que cuentan con aplicaciones que se instalan en la PC y sincronizan su contenido con un servidor cada vez que hay un cambio. Después se pueden descargar en otra computadora, tableta o celular para seguir trabajando.

Cómo seguir conectado
Aun con el trabajo online, el UPS o el estabilizador de tensión, si se corta la luz habrá que decirle adiós a la conexión a Internet. Salvo que se use la red de telefonía celular. Sí, el 3G va y viene, y no lo hace a la carrera, precisamente. Pero si mandar un mail es la diferencia entre cumplir con el trabajo o caerse del mapa, es una solución.

Aquí hay dos opciones: comprar una antenita USB para la PC o la notebook (con el consiguiente costo de la línea adicional), o usar la conexión del celular, si es que tenemos un abono con un buen plan de datos. Todos los smartphones modernos, con Android, Windows Phone, BlackBerry 10 o el iPhone, permiten compartir la conexión 3G del teléfono, creando una mini red Wi-Fi (en Symbian hay que descargar una aplicación ). Hay que tener en cuenta que esto agotará más rápido la batería del celular; se puede usar como módem y a la vez cargarlo conectándolo a la notebook, pero esto reducirá un poco la autonomía de la portátil en cuestión.

¿Necesita que el celular se mantenga con carga? Adiós al 3G, al Wi-Fi (obviamente) y al Bluetooth. En 2G los mensajes de chat y los mails llegan igual, y gasta menos batería. Si vamos a redoblar la apuesta, podemos bajarle el brillo a la pantalla (que igual se verá bien con poca luz) y cortar la conexión de datos para depender sólo de las llamadas y SMS.

Eventualmente se puede pensar también en un cargador para el auto; hay versiones para cargar dispositivos USB y otros que tienen conectores casi universales para la notebook, para darle un poco más de energía. Precio: 50 a 100 pesos.

Seamos creativos
En los últimos tiempos se hicieron relativamente populares tres clases de dispositivos que pueden sacarnos de un apuro.

Uno: las linternas LED, de mucho menor consumo que las tradicionales; es un buen momento para comprar una (aun las pequeñas alumbran bastante) y dejarla a mano. Por 100 pesos se consiguen buenos modelos. Alternativa: las que usan los amantes de los deportes extremos y de la vida al aire libre. Se ponen como una vincha e iluminan desde nuestra frente. Uno queda como un minero del siglo XXI y no será aplaudido por su elección estética, pero es comodísimo porque libera las manos.

Dos: las baterías externas. Las más recientes apuntan a darle un poco más de energía a celulares y tabletas (y eso está bien para mantenernos comunicados en un apagón) pero pueden servir para más cosas, ya que cuentan con un puerto USB estándar. Precio: 200 pesos o más (depende de la marca y de la capacidad, medida en mAh). También hay cargadores solares, que sirven para cargar su batería interna pero no, en general, para cargar un celular en uso.

¿Para qué una batería, además de para darle energía al teléfono o la tableta? Para darle vida al tercer ítem de este apartado.

Hay lámparas y ventiladores USB (entre 50 y 100 pesos). Son modestos, desde ya. Pero para tener un poco de luz en el ambiente y no andar chocando contra esos muebles que parecen reubicarse en la oscuridad, o para tener una brisa -suave- que le aporte un poco de aire fresco a los chicos (sobre todo, en esas noches en las que el viento parece una ilusión), puede resultar una buena inversión.

Se conectan al puerto USB de la notebook o al que incluye alguna de las baterías portátiles mencionadas arriba, y listo. La luz, sobre todo, no gasta mucha energía, y con la batería cargada debería iluminar un rato largo. Aquí, por supuesto, también se puede usar la linterna del teléfono para matizar el apagón..

La Nación