Este invierno rigen aumentos fijados en 2008, que hasta ahora habían sido suspendidosLos incrementos son de hasta 300 por ciento para altos consumos. Podrían llegar al 17 por ciento de los hogares.
Sorpresa. Las facturas de los hogares de consumos por encima de 1.000 kilovatios llegaron con aumentos.
El Gobierno nacional les quitó unos subsidios –para los meses de invierno– a los hogares con mayor consumo de luz. Eso significa que los hogares con facturas superiores a los 1.000 kilovatios bimestrales recibieron boletas con valores hasta 300% superiores a las de los mismos meses del año pasado.
La decisión del Gobierno tomó por sorpresa a las ligas de consumidores. Como cuando retiró las ayudas a los servicios de agua y gas, el Poder Ejecutivo lo anunció, ahora se esperaba lo mismo. Pero no sucedió. Desde 2009, el ENRE –ente regulador de los servicios de luz, que depende del Ministerio de Planificación– publicaba todos los años una resolución donde dejaba sin efecto aumentos de tarifas para el invierno. Pero, al no haber una nueva norma este año, para junio, julio y agosto no hubo descuentos para los hogares que consumen más de 1.000 kilovatios.
La Asociación de Consumidores Libres –presidida por Héctor Polino– está evaluando el impacto real en el aumento de la electricidad. “Lo más probable es que esta omisión responda más a la política de reducción de subsidios que a un olvido”, explicó.
En las empresas no quisieron hacer comentarios sobre esta modificación. Según ellas, hay un 10% de consumidores que llegan a estos niveles de consumo. Algunos estudios privados calculan en 17% la cantidad de hogares que tendrán que pagar más este invierno.
La suba en la factura es diferente según el consumo. El aumento llega a más de 300% para las boletas con un altísimo consumo de energía eléctrica (2.800 kilovatios bimestrales), mientras que será 70% más cara para hogares de consumo medioalto (desde 1.400 kilovatios).
“En el invierno, los consumidores se desplazaron hacia el consumo de equipos de aire frío-calor, pensando que la luz no había subido, como si pasó con el gas, y ahora se sorprenderán porque no fueron notificados sobre esta suba”, explicó el ex subsecretario de Combustibles Cristián Folgar. “En los meses de invierno, la cantidad de hogares que consumen más de 1.400 kilowatios no es la misma que en el resto del año, crece y puede ser entre el 20% y 25% del total”, estimó.
“No hay aumento, hay un subsidio que cada vez que se aplicaba era anunciado y esta vez no fue publicado en el Boletín Oficial”, detalló un conocedor de la situación.
El Gobierno anunció un aumento en la luz para el invierno en 2008.
Pero desde 2009 lo viene suspendiendo. Las tarifas de luz están subsidiadas todo el año. Pero, además, regía un 100% de descuento para los consumos extras en junio-julio, y en un 70% de descuento para agosto y setiembre. Eso era por el pico del invierno. Ya no corre más.
El argumento de una quita de bonificaciones no anunciada fue varias veces motivo de enojo del Gobierno con las telefónicas cuando aumentaban sus precios de esa manera. El Gobierno afirmaba que se trataba de una suba encubierta. Lo mismo que sucede ahora con las facturas de la luz.
