martes, 19 de marzo de 2013

LUCES DE EMERGENCIA

“Son las leyes del juego para poder trabajar”

ETIQUETAS

18/03/13  Clarin

Con la compra de grupos electrógenos, los comerciantes y vecinos encontraron “soluciones” que minimizan el impacto negativo de los cortes en sus rutinas. Pero el costo de estos equipos se pagan con el propio bolsillo.

“Usar el grupo electrógeno durante ocho horas cuesta $ 200 en combustible. Y sin resarcimiento alguno”, dice Rudy, encargado de Scombro, un negocio ubicado en Avellaneda y Nazca.

En el supermercado Leo, de Salguero al 600, los dueños compraron un grupo electrógeno cuya potencia alcanza para que el local tenga luz, pero no para que las cámaras de refrigeración funcionen si hay cortes. En esos casos, César, el carnicero, recurre a una solución menos técnica: “Le pido la cámara prestada a la pollería de la esquina para salvar la carne”. “Los problemas con la electricidad llevan años –analiza Alberto, encargado de la heladería Faricci de Abasto–. Antes la luz se tiraba por cables, ahora están los grupos electrógenos. Son las leyes del juego: sin equipo, en un negocio como éste no podés trabajar”.

No todos los que invierten en grupos electrógenos son comerciantes. Jorge, un vecino de Haedo que trabaja en un minimercado en Capital, destinó un porcentaje de sus ahorros a la compra de un grupo electrógeno para su casa. “En el negocio sin un grupo electrógeno te fundís. No vendés, no facturás y se te pude toda la mercadería. Comprar uno para uso casero no es una necesidad, pero como solución es espectacular. El tema es el costo. Yo lo tengo guardado en el garage, donde le armé una repisa especial. Si hay un corte de energía, tengo luz en toda la casa, además de que la heladera y el aire funcionan. Una vez incluso se lo presté a un vecino para que pudiera celebrar un cumpleaños”, cuenta.

No hay comentarios: