jueves, 2 de enero de 2014

Comienza el año con avatares políticos a media luz

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En sus últimas palabras del pasado año, el gobernador Daniel Scioli se refirió a la crisis energética que se hizo sentir en el Conurbano más que en el interior,

Comienza el año con avatares  políticos a media luz

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El 2014 ya es una realidad que tiene la particularidad de estar sobrecargada de problemas cotidianos, en donde los corte de energía, con sus consecuencias en otros servicios públicos básicos se hicieron sentir en el conurbano bonaerense.

En sus últimas palabras del pasado año, el gobernador Daniel Scioli se refirió a la crisis energética que se hizo sentir en el Conurbano más que en el interior, aunque allí, en las grandes ciudades también fue un problema.

Entre brindis, el mandatario provincial dijo que "apelamos y exigimos a las empresas que tienen la responsabilidad de la distribución y se les confió este servicio tan sensible, que se normalice la situación en los hogares que están pendientes, porque la falta de luz trae aparejada la falta de agua". Agregó que la provincia está en "alerta sanitaria" para prestar atención primaria por la falta de agua y detalló que las localidades más afectadas por los cortes energéticos eran Lanús, Avellaneda y La Plata.

Las palabras del gobernador llegaron después que varias voces de jefes comunales se hicieran oír. La mayoría representantes del oficialismo, que señalaron como principales responsables de la situación a las empresas y pidieron repetir "lo que se hizo con Aguas Argentinas, el Correo Argentino, Aerolíneas, YPF y las AFJP".

Agobiados por los reclamos de sus vecinos que sufren los cortes en el suministro de energía eléctrica, los intendentes reclamaron la necesidad de avanzar, de manera progresiva y con distinta forma, en la "estatización" del servicio de distribución de energía eléctrica.

Intendentes de la Federación Argentina de Municipios (FAM) repudiaron y reclamaron obras e inversiones a las distribuidoras de energía del área Metropolitana -Edesur, Edenor y Edelap- a raíz de la falta de respuestas y los cortes de luz en sus distritos.

Los jefes comunales exigieron a las prestatarias "resolver rápidamente los problemas que padecen los vecinos" y que "les brinden las explicaciones que de manera irresponsable aún no han sabido brindar a muchos de sus usuarios ante los cortes de energía".

"Resulta imprescindible que acompañen el aumento del consumo con las obras e inversiones que les corresponden, las cuales no han cumplimentado en cada uno de los distritos de la forma en que habían sido pautadas", agregaron los jefes comunales en un comunicado.

El reclamo lleva las firmas del intendente de Florencio Varela y presidente de la FAM, Julio Pereyra, y los mandatarios comunales Fernando Espinoza, de La Matanza; Alberto Descalzo, de Ituzaingó; Jorge Ferraresi, de Avellaneda; Mariano West, de Moreno; Francisco Gutiérrez, de Quilmes; Hugo Curto, de Tres de Febrero; Santiago Carasatorre, de Lomas de Zamora; y Darío Díaz Pérez, de Lanús, entre otros.

Pero al mismo tiempo, algunos de esos intendentes, ya de forma particular y no con aquel sello institucional, deslizaron impresiones sobre posibles decisiones futuras ante este estado de cosas.

Uno de ellos, el alcalde de Lanús Darío Díaz Pérez, que soportó movilizaciones ante su domicilio particular de vecinos molestos por los cortes de energía, reclamó estudiar "de qué manera el Estado puede hacerse cargo, en forma progresiva," de brindar el servicio que las empresas no pueden garantizar.

"Son un desastre total" aseguró Díaz Pérez e interpretó que la crisis actual en materia energética, "pone en evidencia su incapacidad progresiva y su dificultad para actuar ante situaciones de coyuntura".

Su par de Morón, Lucas Ghi, también reclamó la necesidad de "discutir la continuidad al frente de la prestación" de las empresas privadas que actualmente brindan ese servicio.

El jefe comunal explicó, además, que el municipio debe suplir las falencias operativas de las empresas con cuadrillas propias, para que, dijo, "no tengan motivos para dilatar respuestas" a los usuarios afectados por los cortes de energía.

"Este modelo de prestación da cuenta de que las prestatarias no supieron dar respuestas, lo que a esta altura es insostenible para muchas familias", aseguró Ghi, tras lo cual propuso discutir el futuro de la prestación, "para ver qué hacemos con estas empresas".

Su vecino, el intendente de Tres de Febrero, Hugo Curto, también reclamó que "hay que estatizar las empresas de electricidad, tal como se hizo con Aguas Argentinas, las AFJP y Aerolíneas".

Además de la misiva institucional, los referentes de la Federación Argentina de Municipios, en su versión nacional y bonaerense, el intendente de Florencio Varela, Julio Pereyra y de Ituzaingó, Alberto Descalzo, cuestionaron a las empresas, y reclamaron, a coro, buscar "la responsabilidad en las empresas" que -resaltaron- "deben hacer las inversiones necesarias para que esto no pase más".

En gobernación saben que estas expresiones de los intendentes llegarán más temprano que tarde a la mesa de trabajo del gobernador, receptivo como se muestra de las demandas de los referentes territoriales de la administración. Por ello, quizás, el flamante el secretario de Servicios Públicos, Franco La Porta, convocó al armado de un "comité de crisis" sobre la situación energética, que estará integrado por el organismo de control provincial, OCEBA; las empresas de distribución de energía EDEA, EDES, EDEN y Edelap, y las federaciones de cooperativas eléctricas de la provincia, con el objetivo de actuar inmediatamente en el restablecimiento del servicio de las zonas que aún tienen problemas y en los resarcimientos a los afectados.

Pero hay más: La Porta también puso como tarea para el Comité de Crisis lo que aparece como el primer espacio institucional de "debate sin fronteras": plantear los pasos a seguir para la provisión del servicio sin inconvenientes.

"Estamos enfocados en trabajar en la urgencia, pero insisto en que vamos a ser rigurosos en trabajar también en la situación de cada ciudad y controlar la planificación de inversiones y obras de cada empresa, porque sencillamente esto no puede volver a pasar", explicó el secretario de Servicios Públicos.

Pero, además, el funcionario parece haber ensayado una primera respuesta a los intendentes quejosos: "Estoy recibiendo los informes de situación e inversión que le solicité a cada empresa y no sólo vamos a analizarlos con nuestro equipo técnico, sino que no vamos a dudar en intervenir para que las obras e inversiones sean las adecuadas para asegurarles el servicio a los ciudadanos".

Mientras tanto, en distritos fuertemente afectados, la crisis copó la agenda local. En La Plata, el concejal massista Ramón Arteaga sentó posición sobre el tema de fondo al señalar que"no tiene sentido discutir hoy sobre el futuro de Edelap, habrá que estudiarlo una vez que se resuelva la emergencia y no creemos que actualmente la provincia o el municipio puedan prestar un mejor servicio".

Casi en el mismo sentido se manifestó en Lanús el concejal del PRO Martín Medina. "Se puede sancionar y cambiar de concesión, pero no estatizar", dijo. Allí también se expresó el radical Emiliano Bursese, que señaló "es grave, porque da cuenta de un gobierno en el que no funcionan los más mínimos controles a las empresas privatizadas, que no es nuevo, viene de los 90. Es una de las grandes deudas que tiene la democracia con el vecino, porque desde cualquier punto de vista no tiene el control que tiene que tener".

El concejal opositor Marcelo Pellegrini, de Lomas de Zamora, evaluó que "estatizar Edesur no tiene nada que ver con una solución", y remarcó que "el problema excede enormemente a las empresas, porque están casi intervenidas".

En Avellaneda, concejales del FR pidieron convocar a sesión extraordinaria. El pedido estuvo fundamentado "ante la extrema necesidad de proponer y establecer la pronta gestión para solucionar el problema energético que está devastando la localidad. Es innumerable la cantidad de barrios afectados, no solo energéticamente, sino sin agua, muertes de niños y personas mayores, por no tener lo esencial de la vida, derecho adquirido de todo ser humano, no teniendo ni agua ni luz, a su vez se incrementa la inseguridad, un tema candente que hasta la fecha no ha tenido ninguna solución al respecto".

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