El número de víctimas publicado el día 28 de diciembre se amplió con otra: nuestro padre, quien después de haber padecido la falta de luz y agua varios días, tras descompensarse falleció.
Con el edificio a oscuras, la situación fue un infierno: sin aire acondicionado ni ventilador y con la escalera como única salida. Tenía 87 años, estaba en cama, sin movilidad y al cuidado de su esposa. Nuestra madre sufrió hasta la muerte de papá con el esfuerzo de subir y bajar por una escalera a oscuras para permitir el acceso del personal auxiliar que nos daba una mano.
Esta situación, sumada al hecho de no tener respuestas concretas de Edesur, no nos permitió pensar en tomar otra determinación.
Luego del deceso, la odisea fue conseguir una casa velatoria. Las de su sindicato no tenían electricidad y tuvimos que contratar un servicio particular. El retiro del cuerpo, en el contexto que describimos fue traumático y doloroso.
Es importante que se conozca la consecuencia de los cortes de luz que revelan la irresponsabilidad y negligencia con que se maneja Edesur. Agradecemos poder manifestarnos y solidarizarnos con quienes están sufriendo nuestro mismo abandono.
Graciela, Liliana y Juan Moreno lilysuane@hotmail.com Atento a los reiterados cortes del suministro, sería muy conveniente -ante la falta de una concreta respuesta de las empresas proveedoras- buscar un caudal de información para los usuarios sobre la interrupción del suministro con el objeto de planificar la forma de desenvolverse, más aún enfrentarla con el menor perjuicio económico.
La televisión estatal, con datos actualizados, debería comunicar a la comunidad los sectores afectados, las razones y el tiempo programado y/o estimado del restablecimiento del suministro de electricidad. A la vez hacerlo también por Radio Nacional.
Es muy importante que se den estos datos para que profesionales, comerciantes y particulares puedan programar sus actividades.
Edgardo Scagnetti escagnet@hotmail.com
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